Pero habría que estar ciego para dejarse engañar; este San Valentín es un espejismo. Se trata de interpretar el romanticismo durante un día para canalizar lo que no vivimos el resto del tiempo. Durante un día nos sacrificamos al mito del romanticismo para liquidarlo mejor el resto del año. La eclosión de esta demanda social de la fiesta de San Valentín corresponde a una forma de teatralizar una imaginación que sigue haciendo soñar pero que no se corresponde ya con la forma de vida contemporánea."
Serge Chaumier, El nuevo arte de amar
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