¿Se puede modificar el temperamento de las personas?
Existen
tres rasgos (o factores de la personalidad)
que caracterizan a los individuos. Éstos son los rasgos intelectuales, los temperamentales y los motivacionales que tienen una base genética y ambiental, pero creo que es
importante diferenciar cuáles son mayormente ambientales y cuáles genéticos.
Entre los
rasgos intelectuales podemos diferenciar, según el modelo de Raymond B. Cattell, entre una
inteligencia biológica que heredamos (Gf) y
otra más cultural (Gc). Mientras, el
CI es simplemente un indicador de la inteligencia
general y hasta 25 puntos del CI son modificables por el ambiente, un dato nada desdeñable.
Los
rasgos temperamentales tienen un
carácter innato, son
heredados y poseen
fuerte estabilidad temporal. Estos rasgos son el neuroticismo (N), extraversión (E) y psicoticismo (P). Sin embargo, es muy importante tener en cuenta que
los genes no limitan, sino que extraen información del ambiente y esto hace que los rasgos temperamentales puedan ser acentuados o atenuados según el caso. Una metáfora muy clara es la comparación del genoma con una receta para “cocinar una mente”: los ingredientes están en el contexto y los que elijamos dependen de nuestra preferencia.
Y tampoco debemos pensar que el ambiente es más maleable que la herencia porque el ambiente no actúa después y la herencia antes del nacimiento.
Por último, los
rasgos motivacionales están relacionados con nuestros
gustos e
intereses personales, nuestras
actitudes y nuestros
valores y en este factor de la personalidad
es más determinante la influencia cultural que en los rasgos temperamentales.
Así que
aunque ciertos rasgos vengan en parte predeterminados genéticamente no quiere decir que no puedan estar sujetos a cambios. Además, otra cosa que no debemos olvidar es que
individuos con diferente genotipo* pueden tener el mismo fenotipo** y viceversa, por lo que resulta imposible deducir la constitución genética a partir del fenotipo.
La
ontogenia de los individuos ha pasado históricamente por varias etapas:
-
Preformacionismo: Se creía que en el esperma había un homúnculo (especie de hombrecillo pequeño) que crecía. Después se pasa a la idea de que los genes contienen todo el plan de desarrollo del individuo, es decir, todo está escrito en los genes y el ambiente solo proporciona los medios.
-
Teorías epigenéticas: Atribuyen un papel importante en el desarrollo a factores no genéticos. Esto se interpreta como que los genes limitan la capacidad. Más tarde, se interpreta como que los genes simplemente determinan tendencias.
Sin embargo,
hoy por hoy un gen NO tiene una relación clara con el fenotipo y es algo que los genetistas continúan investigando.
* El genotipo es el conjunto de genes que contiene un organismo heredado de sus progenitores. En organismos diploides (como es el caso de los humanos), la mitad de los genes se heredan del padre y la otra mitad de la madre.
** El fenotipo es la manifestación externa del genotipo y es el resultado de la interacción entre el genotipo y el ambiente. Éste ambiente de un gen lo constituyen otros genes, el citoplasma celular y el medio externo donde se desarrolla el individuo.
Berto nos demuestra que él también puede cambiar.