15/12/09

Una vida sin Peter

Hoy os voy a contar una triste historia, una historia de un hombre querido por todos y a la vez por nadie (su mejor compañía). Él es ese hombre solitario que lo sabe prácticamente todo y nunca se le reconoce nada, excepto sus supuestos fallos y sus aparentes ausencias. Aquel del que la gente sólo se acuerda cuando algo no marcha bien y que algunos fuera del territorio de habla castellana ni siquiera conocen como tal, aunque seguramente lo denominen con el nombre de sus primos Tato, Gato o Dios.

Pero no os dejéis engañar, ni Tato ni Gato ni Dios tienen la capacidad de hacer vibrar la fibra más sensible de las personas como Peter. Expresiones como “no está ni el Tato/Gato/Dios” o "esto no lo sabe ni el Tato/Gato/Dios" son demasiado genéricas, muy poco personales. Sin embargo, el nombre de Peter hace que lo veamos de forma distinta: "no está ni Peter" tiene una fuerza especial, es mucho más cercano y humano. Es por eso que cuando no está Peter no merece la pena estar ahí, porque un lugar sin Peter es sinónimo de la soledad más absoluta, es decir, no hay nadie. Al igual que ocurre cuando Peter no sabe algo, si no lo sabe él, os aconsejo que no os molestéis en intentar averiguarlo, pues nadie será capaz de lograrlo nunca. ¡Pero atentos! No es que Peter no sea nadie, sino que Peter siempre está con nadie, o por lo menos, con casi nadie, y casi nadie es él.

Entonces, ¿qué sería una vida sin Peter? Sería una vida totalmente vacía y solitaria en la que se perdería una gran parte del saber de la humanidad, y como el saber es considerado por muchos filósofos la felicidad suprema, una vida sin Peter estaría marcada también por la tristeza más infinita en medio de la nada. En cuanto a las expresiones anteriormente citadas, no os las toméis al pie de la letra, son simplemente exageraciones de la lengua española; todavía no se ha encontrado lugar tan sumamente solitario en el que Peter no esté. Por esta razón es totalmente inconcebible una vida sin Peter, nadie excepto él sería capaz de aguantar algo así.

Así que creo yo que sería justo empezar a reconocer el importante papel de Peter en nuestras vidas. Menos mal que llegan las Navidades y más de uno jugará al amigo invisible. ¿Y a quién tendrá que dar las gracias por el regalo recibido? A Peter, por supuesto, el amigo invisible universal al que le apasiona estar en los lugares más recónditos sin apenas llamar la atención y saber las cosas más estrambóticas por las que nadie se ha preguntado jamás y que, a la fuerza, se hace un huequecito en el corazón de cualquier ser humano al ser tan especial como solo él puede llegar a ser.

5 comentarios:

alex dijo...

en verdad... Peter merece todo nuestro respeto...

Niet dijo...

http://www.frikipedia.es/friki/Nadie

Tienes cierto arte curioso, me gusta, poder leer el texto con humor pero con un muy serio también y profundo pensamiento existencial...

Y lo mejor de todo es que supongo que solo eres medio consciente de ello :)

Paula dijo...

En realidad Peter es un filósofo, y para hablar de él hay que filosofar... =)

Explorador dijo...

Conozco a ese tipo, pero creía que se llamaba Harry, o yo lo llamaba así, e incluso a veces lo he oído en versión castiza, "Pirri", que puede que sea un chulo que castiga, o que camina, o que hace algo xDDDD...

Paula dijo...

Pero el chulo que castiga no es Pichi?? xDD.

Y bueno, lo de Harry es otra cosa igual como el Gato, el Tato o Dios; pero lo que sí es cierto es que tiene nombre de persona, seguramente este sea su hijo... xD.

Gracias por la aportación!