30/5/10

Contra mis principios

El estrés, la sucia rutina, el desánimo y el cansancio son ya grandes conocidos, algo pegajosos, por cierto. Me persiguen, intento ignorarlos pero siempre acaban saliéndose con la suya. Yo creo que tienen ansia de popularidad.

Van carcomiendo todo lo que encuentran a su paso, últimamente les gusta especialmente destruir relaciones personales y yo les apoyo, les animo a que continúen su magnífica labor y les aplaudo con fervor. Es realmente gratificante decir a las pocas personas que te quedan que te importan una mierda los ánimos que te puedan vender, que prefieres estar a solas con tus parásitos. O al menos eso es lo que parece...

Espero que no pase otra vez, pero me da la sensación de que este es el principio que todavía no ha conocido final distinto.

Volveré, supongo.

13/5/10

Recuerdos de la blogosfera

Y hoy toca poner un meme en blog titulado “Recuerdos de la blogosfera”, gracias a la nominación por parte de Area86. No suelo responder a memes a no ser que me parezcan mínimamente interesantes; pero de este creo que a lo mejor puedo sacar algo que por lo menos me gustará recordar y compartir.

Mis inicios en la blogosfera tuvieron lugar con la llegada de internet a mi casa, allá por el año 2006. Sin saber apenas manejar el mouse ni el teclado (cosa que todavía no domino... ejem) me dio por investigar la red y sus posibilidades y me topé con la moda del MSN Spaces. Solía poner fotos y frases hechas con muchos gifts animados alrededor y con 1001 colorines, tipos y tamaños de letra. Vamos, lo que hoy consideraría un blog basurilla total. Sin embargo, al hilo de esto comenzaba a teclear en Google palabras clave que contenían mis inquietudes en ese momento y de esta manera fui conociendo bastantes blogs, esta vez más serios y maduros. Uno de ellos fue el de ErMoya, a raíz del tema del botellón y el cual, como podéis ver si sois observadores, sigo leyendo y comentando.

Después, en una etapa depresiva, me dio por escribir rimillas y me hice un blog en La Coctelera que murió a los pocos meses de ser creado. Me pasé una larga temporada sin blog (aunque tenía el tipicazo Fotolog) y ya en verano de 2008 una soriana tarde de soberano aburrimiento en el Telecentro cree este nuevo blog sin muchas ambiciones, es más, ni imaginaba que lo seguiría usando hasta ahora.

Al principio la dirección era otra, pero luego decidí cambiarla a greeneyeslioness inspirada en el título de un libro que había visto (pero no leído) en el quiosco de la estación de Chamartín el día que me iba de vacaciones. Se titulaba “El león de ojos verdes” y no sé por qué me gustó la idea de identificarme con él. Supongo que fue más por la originalidad y el encanto escondido de este título que por mi signo del zodiaco y el color de mi pelo y mis ojos. A veces este componente de descripción física me recuerda a los típicos Spaces superfluos de “Shu Morenikaah” o “Shu Rubikaah Reshulona”, pero no creo que el que me conozca bien se llegue a confundir, por eso sigue agradándome el título de mi blog.

Lo que más me gusta de todo esto es que es un modo de ver tanto nuestra propia evolución como la de los blogs que seguimos. A veces le doy al botoncito de entradas antiguas y comparo lo que escribía hace más de un año y lo que escribo ahora. Me fijo en el cambio de pensamiento y también en el cambio a la hora de expresarme, veo cómo lo que ayer tenía como paradigma hoy no me llega a convencer y seguramente lo que hoy me seduce mañana me lo plantearé. Si no estuviera escrito en este lugar creo que no sería tan consciente de ese cambio. Además, es obvia la función social y de ocio que tiene: me gusta también ver los gustos, aficiones, inquietudes y opiniones tan diversas que se pueden encontrar por la red e intentar sacar lo mejor de cada una, ya sea una reflexión, un comentario o una simple sonrisa.

En fin, se pueden sacar más cosas de la blogosfera de las que a simple vista pudiera parecer, porque en el fondo los que la constituyen no son ceros y unos y chismes digitales, son personas con sus "locuras y razonamientos, música y silencios, gustos y disgustos, sonrisas y lágrimas".

Un abrazo para todos vosotros y estáis todos nominados! =)

9/5/10

Desvalorización

Amigos, he caído presa de esa gran mentira que se llama “pasar apuntes al ordenador” o “descansar 5 minutillos, nada más”. Ha vuelto ya el mes de mayo y con él las ganas de disfrutar, de sonreír olvidando el estrés, la presión y la rutina del resto del curso, aunque todavía quede ese fantasmilla de la Selectividad que a veces me da por olvidar xD.

El caso es que tengo una profesora que, además de enseñarnos economía, nos da de vez en cuando su opinión sobre temas de la vida como pueden ser: el menosprecio del esfuerzo en la sociedad actual en favor de la vida cómoda, facilona y vacía, la importancia de estar bien formados en tiempos de crisis y el estudio como algo gratificante en vez de tedioso y horrible, los factores que influyen en nuestra motivación, la (penosa) situación de la educación, las características de nuestra generación (osea, los niños mimados que lo hemos tenido todo xD), todos los estudios psicológicos del momento, las entrevistas del CNN , la honradez y los valores de Rafa Nadal y un larguísimo etc. Temas que inevitablemente me dejan pensando y llegando siempre a la conclusión de que coincido con todas sus palabras e ideas, en todas menos en una: la de que en esta sociedad se le da mucha más importancia al sexo de la que realmente tiene.

En un primer momento a todos nos puede parecer que es cierto. Vemos referencias a él continuamente. Estás esperando el autobús y te es imposible disimular tu mirada lujuriosa hacia el anuncio de ropa interior que hay en la marquesina; si eres de sexo masculino y te encuentras entre amigos alardeas de todo el vocabulario sexual que conoces y dejas bien claro que serías capaz de pegarle 4 pollazos bien dados a esa putilla barata y quedar como el más macho del lugar (o quién sabe si de la historia del universo), en cambio, si eres una fémina comentas con precaución lo bueno que está el tío y si tienes mucha confianza puede dar pie a una charla “tabuizada” sobre experiencias en ese terreno. En mi opinión, en ninguno de los dos casos se le está dando ninguna importancia al sexo, sino todo lo contrario: se vuelve algo sucio y muy muy poco valorado. ¿O acaso se nos ocurre vender por cuatro perras gordas algo que consideramos verdaderamente importante? Seguro que a muchos les costaría vender un lingote de oro a tan bajo precio... ¿Acaso puede resultar atractivo y gratificante para una mente sana algo de lo que solo se muestra su lado más atroz?

Y no me malinterpretéis. Con lo anterior no quiero decir que todos los hombres ni todas las mujeres tengan que ajustarse al comportamiento que he puesto de ejemplo, porque simplemente es eso, un ejemplo entre miles y miles que se podrían coger y en los que se podrían invertir los papeles y ver a hombres hablando con prejuicios y tabúes sobre sexo y mujeres con una jerga y unas actitudes políticamente incorrectas. Aunque me da la impresión de que esto suele ser menos común.

Pienso que el sexo está desvalorizado, reprimido, egolatrizado, satirizado, falsificado, plastificado, castigado, desidealizado y un montón de adjetivos descalificativos más de cuyo nombre no quiero acordarme y que producen en mí un tremendo rechazo. Pero afortunadamente nunca es tarde para alejarse del ruido y desnudarlo de todas las ataduras que le han impuesto los medios de incomunicación, el egoísmo y los (hipócritas) manuales de buen gusto que se empeñan en negar su verdadera naturaleza humana y lo convierten en una triste bazofia como la que vemos hoy en día.